Es
de sobras conocida la importancia de una buena portada a la hora de vender un
libro. Dada la enorme cantidad de títulos que se publican cada mes y lo efímero
de su paso por los anaqueles de las librerías, una cubierta impactante puede
tener el poder de asegurar unas buenas ventas del título en cuestión (otra cosa
bien distinta es la calidad literaria del interior) o, por lo menos, el de
conseguir que muchos lectores potenciales cojan ese libro aunque sólo sea para
contemplarla de cerca y echar un rápido vistazo al interior.
Este
es el primer pensamiento (o el segundo) que me ha venido a la cabeza tras
recibir hoy el boletín de novedades de la editorial Reino de Cordelia en el que
se anuncia la salida al mercado de la obra de Anatole France, Tais:
Sobran
las palabras, así que me he puesto a rebuscar en mis “archivos” otros ejemplos
de cubiertas de libros donde la sensualidad femenina es la protagonista
indiscutible. Aquí va un brevísimo resumen:
¡Viva
el reino de la metáfora!
El
estilo pin-up es un clásico que no pasa de moda; un valor seguro, vamos.
Esta
preciosa portada es un magnífico ejemplo de sinopsis gráfica de una obra
literaria… (y sí, es el mismo Edmondo de Amicis que escribió Corazón; ahí es nada).
Aunque para
realmente impactante, esta ilustración de uno de los libros de Sergio del
Molino (ya sé que repito con Tropo Editores, pero hay que hacer patria):
Y
como colofón, una elegante portada -como siempre- de Impedimenta, pero que
también tiene su aquel:
Y
vosotros, ¿qué otros ejemplos incluiríais y qué opináis de este peculiar marketing visual?
No hay comentarios:
Publicar un comentario